«Memorias de Idhún» es una trilogía escrita por la reconocida autora española de literatura juvenil Laura Gallego García. La premisa con la que comienza la historia es clara: Idhún ha sido devastado por una conjunción astral que mató a todos los unicornios y dragones; menos a uno de cada uno. No obstante, ese dragón y unicornio tuvieron que atravesar la puerta hacia nuestro mundo y las personas en Idhún les perdieron el rastro. Pero es que Idhún no es como la Tierra, donde la magia se estancó y, eventualmente, murió; en Idhún la magia está en el ambiente -debido a los unicornios, quienes son los que le entregan el poder de la magia a los magos- y es habitado por seis razas sangrecalientes -más los dragones- y una sangrefría -más los sheks-. Los sangrescalientes son los humanos, feericos, celestes, varus, gigantes y yan; mientras que la raza sangrefría son los szish o hombres-serpientes.
Hecha ya una leve introducción a lo que es el tema en general y qué nos vamos a encontrar (no en el primer libro) a lo largo de la historia, pasemos a las demás características.
La trilogía está entrelazada de una manera muy intrínseca. Al término de un libro te dejan con muchas dudas que sólo el siguiente responderá y así hasta el tercero. El primero de los libros, «La Resistencia» -que a su vez se divide en dos sub-libros más-, nos presenta el conocimiento paulatino de Idhún.
No obstante, la historia comienza es cuando Jack pierde a sus padres a manos de un sanguinario y frío humano que ha sido enviado por Ashran -quien conjuró la conjunción astral y mató a los dragones y unicornios- a la tierra para acabar con los idhunitas exiliados. Este chico se llama Kirtash, uno de los protagonistas de la historia. Posteriormente conoceremos a un puñado de personajes, como Shail, Aslan, Victoria y unos cuantos más.
Laura Gallego García maneja de buena manera los personajes, y cómo estos van afectando lo que sucede en la historia. Alrededor de Jack-Victoria-Kirtash se va formando una extraña relación que, quizá, sorprenderá a más de uno y que a mí me ha dejado encantado. Porque es la primera vez que veo algo así en literatura juvenil. Esta relación evolucionará a través de toda la historia, los lazos se volverán más fuertes; pero se romperán en ocasiones. Y todo parece apuntar que sólo ellos tres podrán derrotar a Ashran, el Nigromante... aunque quizá fuese mejor que no lo derrotaran... quizá.
Un punto a comentar acerca de esta trilogía es que pasa algo que es extraño. Lo que suele mover a los personajes principales no son valores presentes en historias de este tipo como la lealtad o el sacrificio; uno de los principales focos de esta historia son los sentimientos de los personajes y cómo actúan en base a ellos. La lealtad de Victoria se ve comprometida cuando se enamora de Kirtash; pero ambos logran sacar a flote poco a poco su relación; mientras que Jack se ve cegado por los celos de vez en cuando.
La trama es un punto sólido de la historia en general. Cada cosa queda en su lugar, y la lectura te lleva a sumergirte en Idhún y a desear tener todo el día para leer y leer y acabarte los libros. Aunque uno sea ¡casi de mil páginas! Y quizá ese sea uno de los puntos débiles del último libro, «Panteón», ya que al ser tan largo puede resultar interminable o tedioso para algunos, «Panteón» en ocasiones hace uso de diálogos interminables y, en mi opinión, excesivos y, también, peleas una y otra vez -¿quizá para recompensar que en el primer libro casi no hay confrontaciones?-; no obstante, eliminando lo que digo, igualmente hubiese quedado un libro largo. Es necesario para explicar cada una de las cosas que mueven a los personajes.
La trilogía es más que recomendable, sobre todo para aquellas personas que les gusta Laura Gallego García o que, quizá no ha leído nada de ella, pero le encantan los mundos lejanos y distantes, fantasiosos y rebosantes de magia. Aunque, en el último libro, este mundo se torne extremadamente arriesgado para los mortales, quienes son sólo insectos delante de los dioses.
Sobre la autora:
Laura Gallego García nació el 11 de octubre de 1977 en Quart de Poblet (Valencia). A los once años comenzó a escribir con su amiga Miriam, la que sería su primera novela sin publicar, Zodiaccía, un mundo diferente (disponible en su página web). A los 21 años, cuando estaba estudiando Filología, escribió la novela Finis Mundi, con la que obtuvo el primer premio en el concurso Barco De Vapor de la editorial SM. Con la editorial SM también ha publicado "El Coleccionista de Relojes Extraordinarios", "Crónicas de la Torre", "Memorias de Idhún" y bajo el sello Gran Angular publicó "Las Hijas de Tara". (Tomado de Wikipedia)
Su libro más actual es «Donde los árboles cantan», y se espera la publicación de «Mago por casualidad» para este año.
¡Se les quiere!
DANN
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